Carapachos de langostas contra plaga del arroz

Planta y espiga de arroz

Científicos cubanos realizarán la primera prueba para obtener una sustancia antifúngica a partir del carapacho de la langosta en la propia industria procesadora del crustáceo, con el fin de combatir enfermedades que atacan a los sembrados arroceros, informaron hoy expertos.

Investigadores de la Estación Experimental, perteneciente al municipio de Los Palacios, comprobaron la efectividad del preparado a nivel de laboratorio y ahora crean condiciones para producirlo en días próximos en el Combinado Pesquero de La Coloma, uno de los mayores del país, explicó a Prensa Latina el director de la institución investigativa Alexander Miranda.

Estamos tratando de poner a punta la tecnología en la propia fábrica donde se limpia, prepara y empaca con distintos propósitos toda la langosta capturada en esta occidental provincia -distante 140 kilómetros de La Habana-, insistió el estudioso.


En una etapa posterior será aplicada la sustancia antifúngica -capaz de evitar el crecimiento de ciertos tipos de hongos- en áreas arroceras del municipio de Los Palacios, las cuales funcionarán como parcelas demostrativas.

El resultado final esperado, dijo, será el funcionamiento de un sistema como parte del ciclo productivo y la reducción del empleo de productos químicos nocivos para el medio ambiente.

Miranda comentó que durante las pesquisas especialistas locales determinaron las fases más adecuadas para la utilización del formulado (en etapa de experimentación) y las dosis necesarias.

Con unas 13 variedades de arroz registradas, la Estación Experimental profundiza los estudios sobre el grano para elevar su rendimiento y calidad industrial.

Los tipos Inca LP5 e Inca LP7, creados allí, ocupan cerca del 80 por ciento de la supericie dedicada en Cuba a ese cultivo. Se trata de variedades de probada calidad y elevado rendimiento, estimado en unas ocho toneladas por hectárea, aseguró.

Al referirse a las ventajas agregó que particularmente La Inca LP7 tolera la salinidad y para su desarrollo no precisa de grandes volúmenes de agua, otra de sus cualidades es que resiste los embates de plagas como el ácaro Steneotarsonemus spinki Smiley.

Con casi dos décadas de experiencia, los especialistas del centro pinareño desarrollan investigaciones de conjunto con el Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas y el Instituto de Granos. (Fuente Prensa Lalina)